Una
Segunda Oportunidad
Pedro negó a
Jesús tres veces, ahora una vez resucitado de entre los muertos Jesús le
pregunta a Pedro ¿Me amas? La misma cantidad de veces, ¿qué pensamientos
estarían revoloteando en la mente de Pedro?
Y después que nosotros fallamos a
nuestro Dios, ¿cuántos llamados necesitamos para entender que Dios en su
misericordia quiere que volvamos a Él? A Pedro estas tres preguntas le llevó a
una segunda oportunidad de ministerio, Jesús le dijo: apacienta mis corderos, pastoreas
mis ovejas, apacientas mis ovejas. Si le
has fallado a Dios, dañado tu ministerio y familia, si hoy día sientes que
estás siguiendo a Jesús de lejos toma un tiempo para leer este artículo.
Pedro me amas prédica
En el estudio de Hoy estudiaremos Juan 21:15-19 en donde se presenta a Pedro una segunda oportunidad de ministerio.
Dios toma la iniciativa y coloca algo familiar en el segundo
Lo primero que diremos es que hay algo muy familiar en el segunda llamado y el primero. El primer llamado de pedro a seguir a Jesús pedro lo aceptó con una actitud humilde, lo encontramos en Lucas 5:7-11, aquí Jesús había logrado una pesca milagrosa, después de que ellos pasaron toda una jornada sin pescar, y ahora una vez resucitado en Juan 21:1-6 se narra como ocurre exactamente el mismo milagro, y esa familiaridad hace que pedro y los que con él estaban reconozcan que era Jesús resucitado el que estaba en la orilla de la playa. Pedro había estado con Jesús, pero en el momento cuando las situaciones apremiaron le negó tres veces (Mateo 26:20-35), Pedro durante tres años y medio era uno de los que estuvo más cerca de Jesús junto a juan y a Jacobo, pero cuando la situación se complicó decidió seguirle de lejos (Marcos 14:54) ahora Jesús toma la iniciativa y le llama con un acto familiar. Cuando fallamos a nuestro Dios toma la iniciativa, Él coloca algo familiar en nuestro segundo llamado, algo que nos manifiesta su presencia, su cercanía, algo que nos permite reconocer que definitivamente es Dios que está tratando con mi vida en ese momento. De repente Dios use algunas situaciones, pensamientos, personas que te recuerden con fue tu trato contigo, como ha sido su experiencia de amor para con tu vida en el pasado, mostrándote que los planes para ti siguen siendo presente llamándote a apacentar sus corderos.
La iniciativa de Dios al mostrarte una segunda oportunidad reconoce tus debilidades humanas
Jesús había cambiado previamente el nombre a este discípulo complicado e impulsivo antes llamado simón que era hijo de Jonás, Jesús veía en él una piedra así que le puso Pedro. Pero ahora en ninguna de las tres ocasiones se refiere a él como Pedro, sino que le llama “Simón Hijo de Jonás”. En estas ocasiones Dios reconoce la naturaleza humana y frágil de su discípulo, alguien que como un ser humano estaba propenso a caer y sometido a debilidades humanas, pero aun así mantiene con este Simón el gran llamado de Pedro “serás pescador de hombres” ahora se lo dice como apacienta mis cordero, pastoreas mis ovejas, apacientas mis ovejas. Dios le permite ahora a Pedro un nuevo comenzar una nueva oportunidad para que entendiendo sus fallas pueda entender que necesita de esa alimento que viene de la vid, que debe permanecer como pámpano en la vid que es Jesús pero aun así mantiene firme el llamado de Dios. La iniciativa de Dios al mostrarte una segunda oportunidad reconoce tus debilidades humanas, y te anima a retomar tu ministerio a esforzarte a estar apegado a la vid, a acercarte a Jesús. De repente leyendo estas líneas te veas animado a retomar tu llamado pero hay algo dentro de ti que te asusta porque no quieres fallar nuevamente, Dios sabe que tienes ese pensamiento, pero mantiene firme su llamado para tu vida, pues separados de Dios nada puedes hacer.
Cuando Dios nos brinda una segunda oportunidad requiere una respuesta que reconozca su divinidad
En tres ocasiones Jesús pregunta a Pedro me amas pero fue la tercera que impacto finalmente a este discípulo complejo, él se entristeció. La tristeza de Pedro es más comprensible si se lee el texto en griego, en español sólo se traduce como me amas, pero en griego se usan en las dos primeras ocasiones la palabra “ágape” (amor desinteresado) a lo pedro respondía yo te “fileo (amor de amistad), pero en esta tercera vez Jesús le dice tú me “Fileo” y este cambió de palabra afecta a Pedro que responde: “Señor, tú lo sabes todo”. Cuando Dios nos brinda una segunda oportunidad requiere una respuesta que reconozca su divinidad, por lo que Dios busca impactar su tu ser integral. Cuando Dios nos llama nuevamente a unirnos a sus filas, debemos reconocer que sólo en nuestras fuerzas no podemos presentar defensa de nuestro llamado, que necesitamos la intervención divina, de ese Dios que todo lo sabe, que todo lo puede, que todo lo ve, a nuestro lado fortaleciéndonos en nuestras debilidades. Dios te dice: “bástate en mi gracia, porque su poder se perfecciona en nuestras debilidades” 2 Corintios 12:9. Si en tu vida crees que tus debilidades, fallas y pecados son muchos, que tus pecados han sobrepasado la gracia divina quiero animarte, ahora eres un buen candidato para reconociendo la grandeza de su bondad manifestada en su gracia, puedas retomar ese llamado a seguirle, el versículo 19 del pasaje que estamos estudiando culmina con la palabra “Sígueme”, Jesús murió por ti ven y síguele es grande el ministerio que tiene para tu vida.
El autor es El pastor Gersom Cedeño, Profesor de Química, egresado de la Universidad Pedagógica Experimental libertador, con Mención Honorífica Cum Laude. Cursó estudios teológicos en el Instituto Bíblica Bautista de la Región Oriental de Venezuela, extensión del Seminario Teológico Bautista de Venezuela. Se ha destacado como Misionero en diversos campos desde su adolescencia de Venezuela, y fue Pastor Fundador de La Iglesia Bautista "Comunidad de Amor y Vida" de Maturín estado Monagas,Venezuela. Pastorea a la Iglesia Bautista de Altos de a las Acacias , Panamá City. ver biografía completa, contactos
